El asesinato de Zaida Andrea Sánchez Polanco, alias La Diabla, sacudió a Medellín y se convirtió en un caso clave para las autoridades. Casi un mes después del crimen, se logró dar con los primeros avances con la captura de los presuntos sicarios: los hermanos José Gregorio y Estarlin Oswaldo Morgado Herrera.
A los dos los detuvieron en Barranquilla, capital del departamento del Atlántico de Colombia, tras huir de Medellín.
Según la Fiscalía General de la Nación, a los sospechosos los identificaron gracias a videos de cámaras de seguridad que registraron su presencia en la escena del crimen.
En las imágenes se observa a José Gregorio, el menor de los hermanos de 25 años, conduciendo la motocicleta utilizada en el ataque y a Estarlin Oswaldo, de 29, disparando con un arma equipada con silenciador.
¿Cómo fue el asesinato?
El controvertido asesinato se remonta a la noche del pasado 22 de enero, cuando, a las 7:40 p. m., Sánchez Polanco fue interceptada por dos hombres en motocicleta a pocos metros del hotel donde se hospedaba, en el barrio El Estadio de Medellín.
La mujer había llegado a la capital de Antioquia el 14 de enero, huyendo de su región tras el sicariato de su pareja sentimental, quien fue hallado muerto el 27 de diciembre en El Banco, Magdalena, y la masacre de los cuatro integrantes de la familia Lora Rincón, encabezados por el pastor Marlon Lora, dos días después.
De acuerdo con la información recolectada por El Tiempo, alias La Diabla estaba con su hijo en la ciudad y, al momento del asesinato, descendía de una camioneta de alta gama, la cual se dirigió a parquear en un espacio público en el exterior del Hotel Pass, ubicado a pocas cuadras de la Unidad Deportiva Atanasio Girardot.
El caso de la joven llamó la atención por sus atuendos de marca y porque se movía en una lujosa camioneta marca Toyota Sahara blanca, que, además, estaba blindada.
Crimen de ‘La Diabla’
Uno de los sicarios bajó de una motocicleta y la persiguió por la entrada del inmueble, disparándole en cinco ocasiones: dos tiros en el rostro, dos en un brazo y uno en el costado. Tras la alerta de la comunidad, una patrulla logró llegar a lugar de los hechos cuando la mujer seguía con signos vitales y fue traslada al Hospital San Vicente Fundación.
Sin embargo, debido a la gravedad de sus heridas y pese a la intervención de urgencia, falleció en el centro asistencial.
Después de realizar las primeras pesquisas, las autoridades se percataron del nexo de Sánchez Polanco con la masacre perpetuada el pasado 29 de diciembre en Aguachica, César.
Además, también se identificó que la occisa, de 29 años y oriunda del Cesar, figuraba en investigaciones por delitos como homicidio, hurto y extorsión.
Según la Unidad Investigativa de El Tiempo, presuntamente estaba vinculada a una red de extorsionistas de Aguachica y a un caso en el que se le señalaba de participar en el asesinato de una víctima.
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