La tanda de penaltis premió este sábado 6 de julio el hambre y la fe de la selección uruguaya, que ganó por 4-2 a Brasil tras el 0-0 de los noventa minutos pese a quedarse con diez en el último cuarto de hora y envió a la Celeste a las semifinales de la Copa América, en las que le espera la extraordinaria Colombia de James Rodríguez.
Fue una victoria acorde al estilo y tradición de la Celeste. Sufrida, luchada hasta lo último, sin dejar de creer incluso cuando se quedó con diez hombres a falta de quince minutos para el final por la roja a Nahitan Nández. Apenas concedió oportunidades a un Brasil que, sin Vinicius, suspendido por acumulación de tarjetas, se quedó sin chispa.
De acuerdo a este resultado, la Celeste chocará con la selección colombiana en Charlotte, en el próximo desafío de las semifinales.