El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva será sometido a otro procedimiento quirúrgico este jueves 12 de diciembre, con el fin de evitar nuevas hemorragias en su cerebro.
De acuerdo con un comunicado publicado por la Presidencia, el procedimiento al cual se someterá Lula, forma parte de un programa terapéutico que “completará” la cirugía endovascular que se llevó a cabo el pasado 10 de diciembre.
“Pasó el día bien (Lula), sin complicaciones, realizó fisioterapia, caminó y recibió visitas de familiares. Como parte del programa terapéutico, mañana por la mañana completará la cirugía con un procedimiento endovascular (embolización de la arteria meníngea media”, se lee.
El Gobierno informó que a las 10 de la mañana, hora local, se llevará a cabo una conferencia de prensa en donde se darán mayores detalles de los procedimientos médicos.
El mandatario, que permanece en cuidados intensivos en el Hospital Sírio Libanês, en São Paulo, se encuentra bajo la supervisión de su equipo médico, el cual está bajo el control del doctor Roberto Kalil Filho y la doctora Ana Helena Germoglio.
Según el Gobierno brasileño, la salud del presidente se complicó el lunes por la noche, cuando experimentó un fuerte dolor de cabeza que lo llevó a realizarse una resonancia magnética en Brasilia. Los resultados de este examen revelaron la presencia de una hemorragia intracraneal, lo que motivó su traslado inmediato a São Paulo para la intervención.
¿Qué ocurrió?
El presidente sufrió una caída en su casa a finales de octubre, lo que le causó una pequeña hemorragia cerebral y un traumatismo en la nuca, que requirió suturas.
El parte médico indicó que el jefe de Estado registró una “herida contundente en la región occipital”, aunque se encuentra bien. De acuerdo con CNN, Lula resbaló en el baño y se golpeó la nuca en horas de la noche del sábado 19 de octubre, luego de regresar de su viaje a São Paulo.
A principios de noviembre, los exámenes médicos indicaron que su estado se había mantenido estable, lo que generó cierta tranquilidad en su entorno. No obstante, la lesión obligó a Lula a cancelar el pasado 20 de octubre un viaje a Rusia, donde tenía programada su asistencia a una cumbre del grupo BRICS que se celebrará en Kazán.