CARACAS – El dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, utilizó su programa Con el Mazo Dando para cuestionar fuertemente lo que denominó el «resurgimiento» del prófugo de la justicia, Leopoldo López, vinculándolo con una nueva agenda golpista respaldada por intereses de Estados Unidos.
Cabello centró su intervención en la recién creada fundación de López, «World Liberty Congress», una organización que, según el dirigente chavista, se dedica a la «oposición por oposición» con el único fin de «recaudar dinero», en sociedad con una ciudadana iraní y un ruso.
El también primer vicepresidente del PSUV subrayó el notable impulso que, al parecer, recibe esta cuestionada organización por parte de «alguien poderoso en EE. UU.». En este contexto, Cabello reveló que la fundación planeó intencionalmente un evento mundial en Berlín para coincidir con un foro de María Corina Machado en Miami, acción que fue señalada directamente como un intento de «sabotear el evento» de la líder opositora venezolana.
Cabello también reveló la existencia de un lobby contratado por López en Washington con un mensaje específico para sus «amigos gringos». La propuesta central sería que el prófugo de la justicia tiene la capacidad de «quebrar» a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), a cambio de que se le otorgue la presidencia de una «supuesta Junta de Gobierno» en Venezuela.

La burla del líder chavista se extendió a la versión ofrecida por López sobre el fallido intento de insurrección del 30 de abril de 2019. Cabello afirmó que López culpa de su fracaso a una supuesta «traición» cometida por sus aliados opositores de aquel momento, Henrique Capriles y María Corina Machado, buscando deslindarse de la responsabilidad de la fallida operación.
El dirigente chavista cerró su intervención desestimando las aspiraciones y maniobras de López, no sin antes ironizar sobre el dramatismo de su narrativa. Con una frase categórica, Cabello despidió el tema, sentenciando que el guion del líder opositor es tan inverosímil que «ni Netflix se atrevería a tanto», en referencia a lo rebuscado de sus argumentos.





