Un juez de Sydney determinó el viernes que el expiloto del Cuerpo de Infantería de Marina estadounidense Daniel Dugan puede ser extraditado a Estados Unidos tras ser acusado de entrenar ilegalmente a aviadores chinos, lo que deja al secretario de Justicia como la última esperanza de Dugan de permanecer en Australia.
El magistrado Daniel Reiss ordenó que el hombre de 55 años y originario de Boston permanezca detenido en espera de su extradición.
Aunque sus abogados dijeron que no tenían fundamentos legales para objetar la decisión del magistrado de que Duggan era elegible para ser extraditado, presentaron argumentos ante el secretario de Justicia Mark Dreyfus sobre por qué el piloto no debería ser entregado.
“Estoy muy seguro de que el procurador nos dará tiempo suficiente para ventilar todos los temas que, de conformidad con la Ley de Extradición, no pueden ser tratados en un tribunal australiano”, dijo Bernard Collaery, abogado de Duggan, a los reporteros afuera del tribunal.
La oficina de Dreyfus señaló en un comunicado que el gobierno no hace comentarios en temas de extradición.
Saffrine Duggan, esposa del expiloto y madre de sus seis hijos, dijo que la audiencia en el tribunal de extradición fue “un simple formalismo”.
“Ahora, pedimos respetuosamente al secretario de Justicia que atienda de nuevo este caso y que envíe a mi esposo de regreso a casa”, dijo ante un grupo de reporteros y simpatizantes afuera del tribunal.
Juez autoriza extradición a EEUU de expiloto
El piloto ha pasado 19 meses en una prisión de máxima seguridad desde que fue arrestado en 2022 en su casa familiar, en el estado de Nueva Gales del Sur.
En una acusación presentada en 2016 por el Tribunal de Distrito de Estados Unidos en Washington, D.C., abierta a consulta a finales de 2022, los fiscales afirmaron que Duggan conspiró con otras personas para entrenar a pilotos militares chinos en 2010 y 2012, y posiblemente en otras fechas, sin solicitar una licencia adecuada.
Los fiscales señalan que Duggan recibió alrededor de nueve pagos por un total de 88.000 dólares australianos (61.000 dólares estadounidenses) y viáticos internacionales para otro conspirador, para lo que se describió en ocasiones como “entrenamiento para el desarrollo personal”.
Fuente: AP/msn.com/es