Dicen que cada país tiene un protagonista que marca de forma trascendental el arte. en México fue Frida Khalo, en Italia Da Vinci, pero en Venezuela fue Armando Reverón. Mejor conocido como “el loco genio de Macuto”.
Su estilo tan atípico cambió la línea que se llevaba en esos años. Armando Reverón no basó su arte en los sentimientos, sino en la percepción del mundo, trabajando el realismo con distinciones de lo natural.
¿Quién es Armando Reverón?
Nació el 10 de mayo de 1889, precursor del arte Povera, conocido como uno de los iconos más importantes del siglo XX en América Latina. Afectado por la fiebre Tifoidea a los doce años y de una esquizofrenia tardía, fue víctima de ataques, períodos depresivos y crisis psicóticas.
La gran mayoría de sus obras fueron expuestas en contra del autor, Reverón no era amante de las exposiciones, algunos dicen que era muy celoso con su arte y no le gustaba compartirlo, sin embargo, cambió muchos de sus cuadros por botellas de ron y whisky.
Armando es criticado por haber sido un hombre muy primitivo y salvaje, sus creencias parecían muy extrañas para los conocidos del artista. Muchas personas aseveran que la demencia le afectó grandemente con el paso del tiempo. El cuestionamiento de los hábitos del artista como taparse los oídos con agua de mar o beberla, implicaba su estado mental.
En 1921 se instala en Macuto en el Litoral Central de Venezuela, lugar que se convirtió en su taller y hogar al mismo tiempo.
“El loco de Macuto”
A medida que crecía la genialidad de un artista exótico, irracional y primitivo; también nacía la leyenda del «Loco de Macuto» por parte de una sociedad que no lo comprendía.
Su obra y figura fue admirada por artistas e intelectuales como Pablo Picasso, Margot Benacerraf, Alí Primera, Jesús Rafael Soto, Antonio Saura o Sofía Ímber.
En el 2007 el MoMA le dedica una retrospectiva; siendo esta la primera que le dedica a una artista venezolano y la cuarta a un artista latinoamericano después de Diego Rivera (1931), Cândido Portinari (1940) y Roberto Matta (1957).
Falleció en el Sanatorio San Jorge en Catia (Caracas) a los 65 años. Desde el año 2016 sus restos mortales reposan en el Panteón Nacional de Venezuela.
Con información de Steemit
