El presidente Joe Biden y su equipo de seguridad nacional monitorearon el sábado el ataque aéreo de Irán contra Israel, mientras las fuerzas estadounidenses unían esfuerzos para derribar drones cargados de explosivos lanzados por Teherán, publicó AP.
Con las tensiones en su punto más alto desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamas hace seis meses, Biden prometió que el apoyo estadounidense a la defensa de Israel contra los ataques de Irán y sus representantes es «férreo».
Las fuerzas estadounidenses derribaron algunos aviones no tripulados de ataque lanzados por Irán que volaban hacia Israel, según un funcionario de defensa estadounidense y otros dos funcionarios estadounidenses que hablaron el sábado bajo condición de anonimato para discutir el asunto.
Estados Unidos e Israel se habían estado preparando para un ataque durante días después de que Irán prometiera tomar represalias por un presunto ataque israelí este mes contra un edificio consular iraní en Siria que mató a 12 personas, incluidos dos generales iraníes de alto rango de la Fuerza Quds de élite de la Guardia Revolucionaria.
«Bajo mi dirección, para apoyar la defensa de Israel, el ejército estadounidense trasladó aviones y destructores de defensa de misiles balísticos a la región en el transcurso de la semana pasada», dijo Biden en un comunicado el sábado por la noche. «Gracias a estos despliegues y a la extraordinaria habilidad de nuestros miembros del servicio, ayudamos a Israel a derribar casi todos los drones y misiles entrantes».
Biden promete apoyo
Biden había acortado una estadía de fin de semana en su casa de playa de Delaware para reunirse con su equipo de seguridad nacional en la Casa Blanca el sábado por la tarde, regresando a Washington minutos antes de que los funcionarios israelíes confirmaran que habían detectado drones lanzados hacia su territorio desde Irán.
Convocó una reunión de directores del Consejo de Seguridad Nacional en la Sala de Situación de la Casa Blanca para discutir la situación que se está desarrollando, dijo la Casa Blanca, antes de hablar con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el sábado por la noche.
El ataque marcó la primera vez que Irán lanza un ataque militar directo contra Israel, con el riesgo de un conflicto regional más amplio.
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